Pablo Moldú, autor de 12 puntos, aportó su dinamismo pero no fue suficiente.En un partido clave para las aspiraciones de clasificar al Final Four por parte de ambos equipos, fue Universo el que se sintió más cómodo, haciendo prevalecer su juego durante casi todo el partido y quedándose con una victoria que le renueva las chances de buscar el pasaje a la instancia final, complicando a su vez el panorama aurinegro. El abultado 89-70, hace que los Tigres tengan que golear hoy a Flamengo si quieren tener posibilidades de seguir avanzando.

Comentaban colegas brasileños que cubren el cuadrangular, su sorpresa por cómo se resolvió el partido, puesto que esperaban algo parecido a lo ocurrido en el clásico, donde un doble solamente separó a Universo de Flamengo. El gran trabajo en equipo más las pinceladas exquisitas de un Valtinho en su esplendor, hicieron que ya desde el segundo cuarto, la distancia fuese irremontable. Universo dominó primero en lo mental y luego tradujo esta superioridad al campo de juego.

El arranque prometía el partido que todos fueron a ver: penetraciones, defensas y un marcador parejo de 19-22 para Universo. Sin embargo, las dificultades que Libertad tiene en la Liga Nacional se hicieron presentes desde el segundo cuarto. Con un contundente 29-11, la visita dejó en claro que pretendía reponerse de la derrota de la jornada inaugural.

Los Tigres buscaron forzar la situación pero no pudieron encontrar respuestas. La rotación de Lamas terminó siendo infructuosa hasta que, promediando el tercer chico, el equipo amagó con la reacción. De 21 puntos abajo se recuperó hasta ponerse a 13 tantos. El público también comprendió que era el momento y alentó pero el aurinegro no pudo mantener la intensidad. Dispuso de varias chances a partir de pérdidas del elenco de Ferreira pero las jugadas terminaban en nuevas pérdidas locales o una contra posterior con triple incluido. Así, de la mano de un Valtinho que no perdonó y encestó sin descanso desde la distancia, haciéndolo sobre la marca, sobre la chicharra, casi sin tener lanzamientos cómodos, volvió a tomar 21 tantos de luz y a comenzar a paladear la victoria (67-46).

Marcos fue puro corazón en los 15 minutos que estuvo en cancha.Pretendiendo jugarse el todo por el todo, los campeones de la Liga Nacional salieron rugiendo al tramo final, aunque no pudieron hacer mucho. En el campo de juego, Arthur, Cipriano y compañía, comprendían que el triunfo ya era suyo pero se reunían para seguir coordinando movimientos. Iban en busca de la mayor diferencia posible ante un rival que por momentos daba la impresión de haber tirado la toalla demasiado rápido.

Además, se dieron cuenta que las faltas (varios terminaron con cuatro acumuladas) les daban rédito ya que Libertad mostró un magro 21/37 en libres. El tiempo también estaba de su lado, en suma, negocio redondo para un equipo que pudo mantener la concentración durante todo el partido, con un objetivo claro, frente a otro que se mostró confuso, dubitativo y cometió errores que no fueron perdonados.

Ahora, el futuro es oscuro y complejo para los Tigres, que deberán salir a plasmar diferencias de movida ante un Flamengo que sabe que aún perdiendo por un margen importante puede clasificar, más aún jugando con el resultado de Universo y Deportes Castro ya puesto. No será sencillo, la mala noche de Libertad le puede costar la clasificación pero aún debe disputarse el último partido.