Con la asunción de Marcelo Ghione por primera vez al frente del Concejo Deliberante se puso en marcha un período especial del cuerpo ya que se ingresa a las sesiones extraordinarias, que deben ser convocadas por el propio titular.
Lo cierto es que han quedado pendientes de resolución varios temas de importancia para la ciudad, el primero de los cuales es el Presupuesto que estará vigente el año entrante, junto con la ordenanza Tributaria, que puede verse como un complemento de aquella.
Asimismo, también se debe resolver la aprobación o no de un nuevo plan de pavimentación de calles, el cual abarcaría unas 20 cuadras en diferentes barrios de la ciudad y tendrían como principal diferencia respecto de la repavimentación o recuperación anterior, el hecho de que deberían ser abonadas por parte de los frentistas.
La nómina de temáticas pendientes se nutre además con la adhesión a la ley de control de cigarrillo, el reordenamiento vehicular en el microcentro, incluyendo el cobro por estacionar y varias propuestas más. Ocurre que la problemática del agua potable, la sanción de más de una ordenanza sobre este particular y su discusión, demandó buena parte del tiempo disponible para las labores en comisión.
Para hacer frente a tanto trabajo, desde el cuerpo, algunos integrantes señalaron que tener un mes y medio de descanso es un período demasiado extenso, analizándose la posibilidad de reducir el receso para así tener más tiempo disponible. Asimismo, para dar una señal positiva a la ciudad, también se analizaba la convocatoria a las primeras extraordinarias para esta misma semana.
