El tiempo del análisis y los merecimientos quedó atrás para Unión. La matemática es la que manda en esta instancia en donde si pretende estar en la siguiente instancia del Torneo Federal, le quedan dos partidos con un único resultado posible: ganar.
Los altibajos que tuvo el equipo de Adrián Tosetto le impidieron estar más holgado en cuanto a las posibilidades. No obstante, los demás resultados le han dado hasta aquí una última oportunidad, aunque debe ser una jugada a dos bandas: por un lado, debe ganar su partido en Corrientes pero al mismo tiempo, esperar por lo que suceda con el cotejo entre Defensores de Villa Ramallo y Juventud Unida. Si este último equipo empata o pierde, Unión tendrá el fin de semana siguiente un verdadero «mano a mano» con los de Gualeguaychú por la clasificación. También puede entrar en la ecuación los de Ramallo pero aquí se volvería a depender de otro resultado.
Para el Bicho Verde, lo más complicado pasa ahora por imponerse en su partido, algo que se le ha vuelto una tarea compleja en las últimas fechas (viene de perder con Sportivo Las Parejas y la semana anterior cayó ante Douglas Haig).
En este momento crucial, Tosetto deberá resolver también cómo emparchar el equipo, luego de que fueran informados tras el último partido Agustín Alberione (3 partidos) y Jonatan Medina (2 partidos), quienes ya no estarán más a disposición por lo que resta del campeonato.
El partido que dirigirá Ariel Montero comenzará a la hora 16, en el mismo horario en el cual se disputará el otro partido del cual depende Unión.
