Eran cerca de las seis de la mañana cuando Belén González padeció los primeros síntomas de trabajo de parto. Madre primeriza, la fecha era especial por doble motivo: la víspera del año que recién se iniciaba y la llegada de su pequeño. Luego llegaría el traslado al hospital local, la internación y la atención recibida por los profesionales que se acercaron al centro de salud.
Recién cuando habían transcurrido cinco minutos del segundo día del año quedó oficialmente registrado como nacimiento el parto de Santino Iván. El pequeño, pesó 3,335 kilogramos y automáticamente se transformó en el primer sunchalense en llegar a la vida, sólo que ni él ni nadie de su familia lo sabía.
En horas de la mañana de hoy, la llegada de felicitaciones y el arribo de los periodistas de los medios locales terminaron de confirmarle a la familia lo que minutos antes se habían enterado por boca de las enfermeras del nosocomio. La alegría no tardó en llegar otra vez a la familia que sigue con atención cada movimiento del pequeño Santino.
Es que no solo fue el primer bebé en nacer en la ciudad sino que es el primer hijo del matrimonio de Belén González e Iván Reduello pero esto no es todo ya que también es el primer nieto tanto por la familia del papá como de la mamá. En fin, un niño que llegó primero y le ganó de mano a varios.
La emocionada mamá prácticamente no tenía palabras para explicar lo sucedido. La especial situación, la presencia de micrófonos y cámaras, todo se juntó y logró que sus sensaciones se mezclaran. “Nos enteramos a la mañana que había sido el primer bebé en nacer en la ciudad, fue muy lindo”, dijo.
La fecha prevista inicialmente para el parto era el 28 de diciembre pasado, día de los Inocentes. Santino evidentemente eligió una fecha un tanto diferente, retrasándose un par de jornadas pero llegando sano y trayendo felicidad a su familia por partida doble.

