En el primer partido televisado en lo que va de la Liga (sin haber tenido ese privilegio en toda la Fase Regional), Libertad cedió otra vez su localía 82-88 en este caso ante el peor equipo de la Conferencia Sur. Ya no lidera la competencia y extraña el funcionamiento de conjunto que lo caracterizó.
El partido comenzó complicado y retrasado. Las elecciones en la AFA hicieron que la Televisación de TyC priorizara aquello y fuera postergando el inicio. Una vez en marcha, la visita se encargó de hacerle sentir a Libertad serias dificultades.
La intensidad visitante y la constante carga sobre el poste bajo -Alloatti y Lee salieron por faltas- terminó siendo demasiado para un equipo que nunca encontró variantes confiables, aún cuando estuvo arriba en el marcador. Los dirigidos por Müller terminaron teniendo demasiadas dudas y lagunas ante un Lanús que aprovechó cada detalle para ponerse el overol y construir una importante victoria.
El 32-19 del cuarto final es lo que permanece en la retina pero antes, hubo un planteo exigente e inteligente de Intonio. El local volvió a extrañar en demasía el aporte de Hopson, perdiendo por segunda vez consecutiva ante su gente. Lejos estuvo de ser un equipo como tal y se mantuvo en juego con aportes individuales de varios jugadores pero que no pudieron combinarse.
Después de un arranque a pura paridad, cuando en el tercer chico Libertad sacó 9 puntos de diferencia, pareció que finalmente comenzaba a doblegar a la visita. No obstante, lejos de relajarse, el granate entendió que debía ganar en intensidad y hacia allí apostó. La distancia de seis puntos con un minuto por delante, hizo que todo se estirara aunque terminó siendo una letanía solamente ya que los libres no permitieron acortar distancias ante un Green que descolló en Lanús y se hizo cargo casi en soledad de cargar con el cierre del partido.
