(Por: Julián Darío Marcos) – Cantamos las 33 y son de mano
Se está viviendo un momento glorioso para el rugby argentino que merece su buena consideración. Como el Fútbol o el Básquet nacional lo siguen los fanáticos pero, también están lo que no lo son tan… ese símbolo celeste y blanca arrastra una creciente tensión emotiva en estos días de rugby.
La publicidad que nos arranca una emoción fantástica, como «… lo 15 animales en la cancha…» o «…los 15 hermanos unidos por el mismo corazón…», declaran intrínsecamente, que Los Pumas van a jugar a un batalla descomunal en una cancha con un adversario complicado.
¿Es así? No.
Se puede ver claramente en este mundial, que los pisotones, puñetes y cualquier actitud son reprendidas y penalizadas por el árbitro. (Y si el árbitro no lo advirtió, están los Line Man. Si no es sancionado, posteriormente la IRB llama a los jugadores y los sanciona).
Conclusión: Hay que portarse bien dentro de la cancha.
Por eso este Mundial es mucho mejor que los anteriores, pues los países se nivelaron en el aspecto físico.
Lo técnico es lo que hace la diferencia.
Tenemos un Portugal humilde, que perdió por goleada frente a Nueva Zelandia, pero tuvo su audacia de clavarle un Try en una jugada bárbara (DT y algunos jugadores son argentinos nacionalizados).
Tenemos un Georgia que estuvo a punto de hacer knock out por adelantado a un Irlanda.
Un Tonga que compite con Sudáfrica por el primer puesto de la zona y que adelantó en decir para su último partido: «A Inglaterra… les ganamos y los dejamos afuera».
Un Italia que puede hacer historia en pasar a la siguiente fase, donde hay varios argentinos en sus filas.
Todos los países concursantes han recibido caídas en su Line Goal (Try) menos uno: Argentina.
De todos los campeonatos mundiales el partido inaugural, el local gana siempre… menos este, en que Argentina sentó precedente al ganarle a Francia. (La IRB tuvo que dar la cara y decir: Los Pumas se clasifican en el 4to. puesto mundial… en la clasificación de todos los países que la integran… atrás… Francia, Irlanda… y otros).
Fue una revancha…? Si. Por años que nuestros jugadores que están allí, no pudieron calzarse la celeste y blanca, porque el club donde actuaban cada uno, no los prestaba para partidos amistosos.
El estadio enmudeció, ante la buena inteligencia en el juego de Los Pumas (no por nada al terminar el Mundial, nuestro Loffreda se va como DT a un club de Francia).
Se viene el último partido (mañana) frente Irlanda. Este adversario ya se encuentra disminuido y siente que tiene que preparar las valijas, pues Argentina quiere ganarle, quiere el primer puesto de la zona. No se contenta con sacar un punto. El rugby se gana o se pierde. El empate (aunque sirve), no está en el temple de ningún rugbiers.
Pasaremos a la siguiente fase, donde el destino nos está proveyendo de una buena carta: Escocia o Italia. Estoy seguro que ninguno de estos quieren cruzarse con Los Pumas, pues ya conocen como será el resultado.
Así que las 33 están cantadas: Los Pumas entran en las semifinales, luego de un trabajo arduo y silencioso.
Con lo ocurrido hasta ahora, para los próximos Mundiales, a los Pumas no los ponemos más en el partido inaugural.
¡Vamos Pumas carajo!
