Siempre alertas, atentos y dispuestos a dejar todo para poder responder una llamada urgente. Esto es algo que se dice habitualmente pero el ejercicio de pensar en esto lo hace mucho más grande, lo enaltece más aún. ¿Cuántas veces postergamos salidas, mandados o visitas por no estar de ánimo, por no tener ganas?
Ellos, lejos de ir de picnic, parten al sonido mismo de la sirena convocante, intentando responder ante una situación que desconocen cómo será y que afecta a personas que seguramente son desconocidas para ellos. No pueden decir, ya me levanto o voy en un rato. Y no lo hacen. Muchas veces he escuchado el ulular de una sirena, inequívoco llamado y mientras algún perezozo sale a la vereda a ver si se puede saber algo desde ese lugar, van pasando en moto o bici voluntarios que como punto de destino tienen el cuartel de Bomberos.
Así fue como ocurrió, por ejemplo, hace un par de años, cuando fueron convocados para combatir el incendio que se desataba en la madrugada en los archivos de Sancor Seguros. Personalmente me trasladé hasta el lugar, tomé fotografías y filmé la situación, mientras intentaba indagar acerca de lo ocurrido. Al cabo de una hora, retorné al calor de mi domicilio pero ellos permanecieron allí. Horas más tarde volví a pasar retornando del trabajo matutino y continuaban allí. Por la tarde, ya controlado el fuego, me acerqué a realizar nuevas tomas fotográficas… y los Bomberos seguían apostados en el sitio. Seguramente muchos habrán salido por la noche y habrán visto la autobomba, firme en el lugar… horas y horas pasaron, como suele suceder ante siniestros de esta magnitud. Ni yo ni muchos de los vecinos de la zona seguían en el lugar, a pesar de vivir cerca y poder ir y venir si así lo quisieran.
Además de esta especie de desarraigo, también están las cuestiones personales, las que los hacen ser aún más ejemplo para todos nosotros. Me refiero a las lesiones, ya por estas horas comentario cuasi público de la ciudad, sufridas por Voluntarios. Accidentes pueden suceder en todos los lugares y a diario, claro que sí, en la vivienda y el trabajo pero en estas situaciones, donde acuden de forma totalmente desinteresada es en las que da cierta impotencia, bronca y necesidad de hacer público el agradecimiento aunque nada tengamos que ver con la empresa o la situación involucrada.
Seguramente, la institución Bomberos Voluntarios sea, para muchos, la de mayor prestigio de la ciudad y mucho tienen que ver este tipo de acciones. Son ellos nuestros héroes, quienes merecen el reconocimiento continuo. En distintos ámbitos del Gobierno y la Legislatura nacional hay proyectos en marcha para poder dar un atisbo de justicia para quienes eligen esta vocación. Los reconocimientos básicos de obra social y otros similares, que para muchos son habituales y no representan grandes erogaciones al Estado, aún estaban siendo discutidos. Como si fuese necesario.
Mientras tanto, los tenemos aquí, entre nosotros, caminando por nuestras mismas calles, saludándonos con una sonrisa en cada cruce y sintiendo que están haciendo lo correcto, que ante cada llamada, la reacción y la salida es lo único que debe hacerse, sin evaluar peligros. Salud entonces, Bomberos Voluntarios, ejemplos diarios del buen proceder. Héroes locales.
El staff de sunchaleshoy saluda a los Bomberos Voluntarios de nuestra ciudad, que día a día cumplen esta abnegada labor.
