Para quienes no conozcan la colonia o la historia de los Maká, aquí reproducimos parte de la información acercada por Germán:
Originarios del chaco central de Paraguay, hace más de 75 años que se encuentran alojados en las inmediaciones de Asunción del Paraguay. El 14 de febrero es el día que festejan, paradójicamente el traslado, un traslado que ha puesto permanentemente en riesgo su cultura, y su existencia.
Alojados en un lugar llamado Colonia Indígena Quenkuket, están dirigidos por el cacique Wonqoyot, en este asentamiento se encuentran unas 260 personas, muchos niños y ancianos, dependen del cacique general, Andrés Tsemhei, alojado en el asentamiento de Mariano Roca Alonso.
La población general de indígenas no supera las 900 personas. La colonia carece completamente de asistencia, solo luz eléctrica y en ocasiones agua potable, existe una iglesia evangélica presbiteriana, el edificio de un centro de salud, sin servicios. Los niños en la escuela estudian hasta el 9ño año, aprenden tres idiomas, maká, guaraní y español.
Luego es difícil continuar los estudios secundarios, en este momento se encuentra estudiando medicina en Cuba, el primer indígena Maká. La población adulta habla poco o escaso castellano y pocos pueden escribir sus nombres sin errores, generalmente acuden a los maestros de la escuela para traducir o escribir bien.
La lengua maká es ágrafa, no hay un sistema ortográfico establecido y por esto no se encuentran textos escritos en lengua maká. Ellos apuestan a la superación a través del estudio, mejorar como personas y tener las mismas posibilidades que nosotros, pero por sobre todas las cosas desean mantener su cultura.
Sus danzas y sus cantos son producto de la vida diaria, así como bañarse en los estanques naturales, o viajar a vender sus artesanías a las urbes. Al margen completamente de la visión del mundo moderno, ellos mantienen sus costumbres, tradiciones y cultura, cualquier cosa que les suceda se trata como un problema goblal de la colonia.
Ancestralmente ellos conocían la sanación a través de productos naturales, incluso tenían control de natalidad a base de yuyos naturales, de esta forma la raza controlaba la natalidad, hoy el crecimiento incontrolado de nacimientos, habla a la clara de que no se tiene en cuenta este tipo de medidas.
Hoy luchan contra la indiferencia y abandono de la juventud, cada caso es tratado en forma individual pero como un problema de todos. El alcohol, la droga y el abandono son el común denominador de los jóvenes, este flagelo no es solamente en los jóvenes Maká.
