Sin lugar a dudas que si al partido del domingo había que ganarlo, esta era la manera de hacerlo: sobre la chicharra pero que se entienda bien, sin nada de tiempo. Sólo los instantes necesarios para saltar, capturar un rebote y convertir. Como en los sueños, cuando todo el equipo, victorioso, se abraza con el héroe. Así fue el domingo y quien no soñó pero sí fue el artífice de una victoria sacada de la galera fue Larry Florence.
El americano de Unión, que llegó para reemplazar a Jackie Rogers, rápidamente se metió en el grupo y captó las intenciones de Arduh para su funcionamiento. El domingo, en el segundo partido del TNA 1 para los albiverdes, fue fundamental en la remontada primero y en el triunfo después.
No fue un partido cómodo para los de Osvaldo Arduh, que se vieron superados por Olimpia durante buena parte del desarrollo. La visita hacía mejor las cosas y eso se notaba en el marcador. Se llevaron el primer chico por 29-18 y el segundo por 45-36.
La primera vez que Unión pasó al frente en el marcador fue cuando transitaban por el tercer cuarto. El 60-59 lo puso Florence, quien en tan solo cuatro minutos había marcado ya nueve tantos y seguiría sumando en su cuenta personal. A partir de allí, el partido se hizo plenamente emotivo llegando a un final que tuvo una sorpresa ya que hasta el momento, la visita había dominado las acciones pero tras un par de desaciertos, se encontró siete tantos abajo (75-68).
Sin embargo, los nervios se apoderaron de los albiverdes, que no pudieron convertir por lo que le dieron más vida a Olimpia. La brecha se fue achicando hasta llegar a 16 segundos para el final igualados. Allí, tomó la pelota Luchino, la tuvo, la aguantó y finalmente tiró al aro. Su lanzamiento no fue efectivo pero por sobre todas las manos venadenses sugieron las de Florence que capturó el rebote y convirtió el doble que le dio la victoria al local. Fue 80-78 y un paso importante para que los hinchas de Unión se olviden de la mala suerte de la lesión de Rogers, quien sigue acompañando al equipo.
