El conjunto que dirige tácticamente Rubén Bucci, mas allá de entregar absolutamente todo, fue derrotado en Villa Rosas por Peñarol 2 a 1 y posteriormente por tiros desde el punto de penal, perdiendo así la gran chance de quedarse con el Torneo Oficial de la Liga Rafaelina de Fútbol.
En la Final y en el cotejo revancha del que la semana pasada había ganado aquí en Sunchales Libertad 3 a 2, en la noche del miércoles Peñarol le ganó a los aurinegros 2 a 1 en el tiempo reglamentario y forzó a la definición por tiros desde el punto de penal, donde lograron ser mas efectivos que su rival ganando 3 a 2.
Más allá de que el gol del triunfo de Peñarol llego con el cabezazo de Mauro Villalba en tiempo de descuento, y eso es lo que da más bronca aún, habrá que reconocer que desde el trámite del juego en sí, a lo largo de los 90’, Peñarol fue más que Libertad, ya que tuvo en gran parte del juego la posesión del balón y logró generar ofensivamente las mejores situaciones, donde Leonardo Raminelli se convirtió en la gran figura de su equipo.
Los goles llegaron todos en el complemento, ya que en apenas 2’ de juego, Patricio Ferrero justificaba todo lo mucho realizado en la primera etapa marcando un verdadero golazo.
Después, Libertad logró equiparar el trámite del partido adueñándose de la pelota en el medio y empujando a su rival cerca del arquero Olivero, fue así que en 28’ tras un rebote, Guillermo Ponte, empata el partido en uno y queda así a un cuarto de hora de poder consagrarse campeón.
En los últimos 15’ el partido se jugó en gran parte dentro del área de Libertad, fue cuando Raminelli agigantó su figura tapando dos remates claros de gol, fue también cuando Villalba anuncio con dos remates y sentenció con el cabezazo final a los 48’ cuando el centro cayó desde la derecha como una puñalada al área aurinegra, gol, 2 a 1 para Peñarol para forzar a la definición por penales.
Y desde los 12 pasos los locales fueron más efectivos, ya que ganaron 3 a 2 con conversiones de Gandin, Andrada y Ferrero, marrando Villaba, mientras que en Libertad marcaron Díaz y Ramos, errando Morgada, Leonardo Raminelli y Góngora.
A pesar del sabor amargo de la derrota, nada se le podrá cuestionar a “este puñado de pibes” que jugó de igual a igual ante un rival con apellidos de experiencia y dilatada trayectoria dentro del fútbol de la Liga, fue así como 1500 personas fueron testigos de la entrega total de un equipo que con muchos chicos, cayó de pie… a lo grande.
Una mención especial para su técnico que para estas finales no incorporó jugadores de otra categoría, ya que con mucha convicción creyó en aquellos que lo llevaron a ganar el título y con ellos también jugó las instancias definitorias. De esa manera “los chicos” seguirán creyendo en su técnico, y eso para Libertad y para Rubén Bucci es sumamente importante.
