Los seres humanos se agrupan por diferentes motivos: similitud de simpatías deportivas, igualdad de profesiones, amistad desde la infancia, intereses comunes que inciden en sus decisiones y se concentran para consumar objetivos que son propuestos anticipadamente. En el libro histórico editado con motivo de los 125 años de Sunchales se decidió invitar a las instituciones de la ciudad para dejar constancia de las actividades realizadas a través de sus trayectorias sobre la base de una diversidad realmente valiosa y múltiple. Exactamente ciento ocho entidades heterogéneas se dieron cita en esas páginas y mostraron el intenso potencial humano y de trabajo que pusieron de relieve la intensa y pujante vida ciudadana.
Heterogéneas en su conformación y objetivos, pero similares en el compromiso, la voluntad, el espíritu participativo, la comprensión de sus responsabilidades y el protagonismo definitivo para llevar adelante la antorcha del hacer, con desprendimiento de apetencias individuales, ya que se trabaja por el bien común.
Las vecinales son un ejemplo incuestionable de personas que se vinculan porque les importa el lugar donde viven, detectan sus bondades y necesidades, anhelan solucionar sus problemas y poner proas hacia el futuro diseñando mejoras para la totalidad del barrio. El grupo humano que constituye ese territorio geográfico dentro de la planimetría territorial siente como propio este suelo y le importa todo lo que acontece dentro de sus límites. Busca a otros para se sumen a la epopeya y comienzan a generar sucesos en líneas ascendentes para dejar constancia en los libros de actas de un cúmulo de acciones valederas.
Construcción esmerada de sus edificios, actividades sociales y recreativas inherentes a distintos grupos humanos (niños, jóvenes y adultos), implementación de talleres, organización de grupos de apoyo para niños en edad escolar, merenderos, bibliotecas, celebración de acontecimientos religiosos, históricos o deportivos, etc.
La primera Vecinal fue la del Barrio Moreno en 1961; en 1969 se suma la del Barrio 9 de Julio y dos años después, la del Barrio Sur (1971). De ese mismo año es la Vecinal del Barrio Colón. Seguirán surgiendo con el Barrio SanCor (que en 2021 celebró sus 50 años); en 1976 se conforma la del Barrio Cooperativo; de 1983 es la Vecinal del Barrio Villa del Parque y de 1996 la del Barrio Centro. En el 2007 se agregó la de Villa Autódromo. Todas con integrantes de valía, hombres y mujeres que con su actividad coordinada hacen de cada barrio un centro progresista, ordenado y dinámico.
Cuando se presenta la contracara, perpetrada por quienes actúan desde las sombras y en desmedro de todo lo bueno y efectivo realizado por la acción comunitaria de quienes tienen sueños y trabajan para cristalizarlos en beneficio de todos, se nos hacen inconcebibles las actitudes indignas como ocurrieron actualmente en desmedro del Barrio Moreno; nos crece la indignación por destruir los logros de tantas horas de trabajo y dedicación voluntaria.
Una frase muy certera afirma: “No importa cuánto lo intente el Mal, nunca podrá igualar el poder del Bien, porque el mal es en última instancia autodestructivo. El mal puede corromper a otros, pero en el proceso se corrompe a sí mismo”. Luces y sombras de la humanidad.
