
La historia de nuestro hospital se remonta al año 1944, cuando el Gobierno de la Provincia, resuelve desarrollar una red de Hospitales Rurales en todo el territorio santafesino. De esta forma, se le asignó el número 32 al que aquí se erigió sobre avenida Belgrano.
De esta forma, se comenzaba a transitar un camino de cercanía de la salud pública a la población en general. En aquel entonces, Sunchales era aún un manojo de casas, con calles de tierra y si bien estaban dándose pasos importantes en el desarrollo de cooperativas y empresas que luego marcarían el rumbo del desarrollo, seguía siendo preeminentemente rural. Fue así como, esta localidad netamente agropecuaria, se plegó de manera ideal con esta propuesta provincial.
Fueron unas treinta personas las que se hicieron presentes el 1º de noviembre de 1944, respondiendo el llamado para darle forma a la cooperadora. Este ente, tuvo la responsabilidad de administrar el flamante hospital en una tarea que se sostuvo hasta 1967.
No obstante este importantísimo paso dado en 1944, antes aún ya germinaba en los sunchalenses la necesidad de contar con un espacio dedicado a la atención pública de la salud. Es aquí donde aparece la figura de Don Carlos Gabasio, quien donó una manzana de terreno frente a la avenida Belgrano. Allí, en este espacio que era uno de los últimos «escasamente poblados» de una pequeña población, se instaló un Dispensario, el cual estaba a cargo de la Comisión de Fomento.
En ese entonces (principios de la década del ’40), predominaban los baldíos en dicho sector y en esa manzana de calle Urquiza había solo una casa y en calle Dentesano e Italia, existía un bar.

Como era lógico de esperar, con el correr de los años, al crecimiento de la ciudad le sobrevino una mayor cantidad de habitantes necesitados de cuidados de salud y el consiguiente apoyo de la Cooperadora y la comunidad toda para poder dar las respuestas adecuadas. Así, fueron incorporándose servicios, personal y distintas prestaciones. El avance mismo puede reconstruirse por quienes recorren los pasillos del hospital puesto que en el edificio fueron quedando las huellas de las diferentes ampliaciones, modificaciones e intervenciones que se efectuaron a lo largo de las décadas.
El futuro no deja de ser promisorio y sorprendente, con un desafío mayúsculo tomando forma a pocos metros del viejo emplazamiento. La modernidad del edificio y el lógico acompañamiento en tecnología y personal, hará que pronto sea un recuerdo el «Hospital Rural Nº 32 Almícar Gorosito» y porqué no pensar en que la tan buscada recategorización permita cerrar una etapa e iniciar una posterior que con seguridad estará a la altura de lo que demanda la historia sunchalense de superación y entrega.
La primera Comisión
– Presidenta: Ángela B. de Ramella.
– Vicepresidenta: Lea C. de Remondino.
– Secretaria: Blanca L. de Gorosito.
– Prosecretaria: Romilda Michelini.
– Secretaria de Actas: Sara Cardoso.
– Prosecretaria de Actas: Fedora de Temporelli.
– Tesorero: Ángel Molinari.
– Protesorero: Juan Bosch.
– Vocales Titulares: Elva Tomasso, Dora Graña y Padre Marcos Tacca.
– Vocales Suplentes: Orestes Remondino, Alfonso Corbat y Cándido Bernardi.
– Revisores de Cuenta: Ángel Volpe, Juan Soutullo y Alejandro Temporelli.
– Asesor: Dr. Almícar Gorosito.
La figura del Dr. Almícar Gorosito
Nació en Sunchales, el 9 de marzo de 1907. Pertenecía a una de las viejas familias, en cuyo hogar encontró la guía y el aliciente para encaminar su vida desde jovencito.
Así fue como después de concluir sus estudios primarios en la escuela Ameghino, continuó en el colegio secundario San José de Esperanza y en el San Carlos de Capital Federal. Ingresó posteriormente en la Facultad de Medicina de Rosario, donde realizó una brillante carrera, desempeñándose durante ese transcurso como practicante en la Asistencia Pública y en el hospital Carrasco. En 1934 se graduó, regresando a Sunchales. No dudó en su decisión para instalar un consultorio.

Mientras se desempeñaba en la Dirección del Dispensario Médico, sumó otras participaciones puesto que junto a otros vecinos, fundó la Biblioteca Popular «Pedro Echagüe». También colaboró con la cooperadora de la escuela Ameghino, el club Deportivo Libertad y otras entidades.
En el año 1944, al crearse el Hospital, asumió como primer Director, cargo que desempeñó con gran responsabilidad, junto a otros colegas. Al crearse, en 1945, Sancor Cooperativas de Seguros Limitada, fue designado como Médico Consultor.
Su fallecimiento ocurrió después de una larga enfermedad, cuando tenía tan solo 45 años de edad. El deceso conmovió a toda la población y repercutió en la zona.














